"El Perú es un país con gran diversidad biocultural, en donde diversos actores contribuyen desde la ciencia y la práctica, así como mediante saberes tradicionales, al desarrollo e implementación efectiva de soluciones basadas en la naturaleza."
Categoría(s) SbN: Restauración Ecológica, Restauración Escala de Paisaje
Desafío social (principal) abordado: Mitigación del cambio climático, Seguridad hídrica; Degradación ambiental y pérdida de la biodiversidad
La restauración del paisaje de bosques andinos se entiende como la recuperación de la cobertura boscosa anteriormente existente en el área (especies nativas), a fin de revertir la degradación de los sistemas naturales, recuperar la biodiversidad y los servicios ambientales, combatir los efectos negativos del cambio climático(1) y recuperar las funciones y servicios ecosistémicos, en especial los vinculados al recurso hídrico(2). Para alcanzar estos objetivos, la restauración del paisaje abarca diversas actividades tales como la identificación y protección de áreas a restaurar, regeneración natural asistida, tratamiento de suelo, remoción de especies dominantes y construcción de viveros.
Uno de los beneficios obtenidos a partir de la restauración del paisaje en bosques andinos es la contribución con las medidas de mitigación a los impactos del cambio climático. Debido al incremento de sumideros forestales de carbono, la restauración del paisaje colabora con la reducción de las emisiones debido a la deforestación y degradación de los bosques(3). Paralelamente, la restauración de los bosques andinos busca mantener y/o recuperar múltiples funciones asociadas a los servicios ecosistémicos mediante la recuperación de la integridad de sus bosques. Entre ellas se encuentran la provisión del servicio hídrico, control de la erosión, mantenimiento del clima local, conservación de la biodiversidad, abastecimiento de materias primas, diversificación económica mediante actividades de ecoturismo y venta de productos y/o servicios, entre otros (4,5)
De esta manera, favorece a las comunidades locales que dependen del bosque mediante el fortalecimiento de sus capacidades para adaptarse a las variaciones climáticas, disminuyendo su vulnerabilidad al cambio climático. Asimismo, dado que estas prácticas requieren de una participación activa de la población, la restauración del paisaje y sus actividades asociadas favorecen al fortalecimiento de las capacidades de organización comunal, además de fortalecer el sentido de pertenencia(3).